El grupo terrorista Boko Haram, conocido por sus ataques a iglesias y civiles, secuestró a las niñas hace tres semanas y amenaza con venderlas.
Lombardi dice que es una negación del "respeto a la vida y la dignidad de las personas”.
El Vaticano pide que las niñas sean liberadas inmediatamente y que se ponga punto y final a la violencia en Nigeria.