El Papa no pudo el Domingo por la tarde partir para Ariccia, donde debía asistir a los ejercicios espirituales de Cuaresma con la Curia, debido a su resfriado. En su reflexión antes del ángelus, reflexionó sobre los 40 días y noches que Jesús pasó rezando y ayunando en el desierto, donde fue tentado por el diablo...