Se intercalaron cantos y lecturas del Nuevo Testamento con meditaciones de los tres principales líderes religiosos.
Durante la Vigilia se mencionaron todos los países en los que actualmente hay guerra: desde Afghanistán, hasta las dos Coreas. Fueron 27 países y zonas de conflicto. Se mencionó la violencia en Centroamérica, las luchas que provoca el narcotráfico en México, la tensión en Venezuela o la guerra en Tierra Santa y Siria e Irak.
También fueron recordados los sacerdotes y religiosos que actualmente están secuestrados o retenidos a causa de estos conflictos.