Cientos de cristianos pentecostales rezaron en esta reunión por la unidad de todos los cristianos. La historia que les contó el obispo pentecostal Tony Palmer les dejó con la boca abierta.
Parece ser que conoció al futuro Papa Francisco cuando era cardenal en Argentina, allá por el año 2006, y que el Papa le llamó por teléfono para saludarle.
Cuando se reunieron en el Vaticano, el Papa le propuso grabar un mensaje con su teléfono móvil para que pudieran verlo todos en la reunión.