El Papa ha enviado 100.000 dólares a Cáritas Polonia para que ayude a los migrantes atrapados en la frontera con Bielorrusia.
Desde noviembre la crisis migratoria en esa región de Europa se ha acentuado. Los migrantes y refugiados malviven en bosques soportando las bajas temperaturas del invierno, que a lo largo de esta semana llegarán a los -8ºC. La UE acusa a Bielorrusia de promover estas migraciones para desestabilizar a la vecina Europa.
Por otro lado el Papa también envió otros 100.000 dólares a los afectados por el tifón Rai en Filipinas, que golpeó con violencia en 11 regiones del país.