La mayoría de cardenales están en Roma para el consistorio extraordinario sobre la familia, pero algunos no han podido asistir.
Entre ausentes, Marian Jaworski y Lubomyr Husar de Ucrania, que no están en Roma por la tensión política en su país.
Como solidariedad por la violencia, lo primero que hizo Francisco en la reunión del viernes, fue enviarles un saludo.