El Papa centró la catequesis del miércoles en el sacramento del Orden sacerdotal. Explicó que quienes son ordenados se convierten en "servidores" como hizo Jesús. Dijo que "ni el obispo es propietario de su diócesis ni el sacerdote de su parroquia. Es propiedad del Señor".
Añadió que para no perder el sentido de este servicio, los sacerdotes y obispos deben alimentar su ministerio con la oración, la escucha de la Palabra, la celebración de la Misa y la penitencia.
Pidió a los presentes oraciones por los sacerdotes para tener "pastores auténticos".