Tras el evento por la paz en el Coliseo el papa clausuró un encuentro con líderes de otras religiones. Todos acudieron al Vaticano para celebrar el 60 aniversario del documento Nostra Aetate. Este texto marcó un cambio de actitud de la Iglesia católica con respeto a las otras religiones. Roma dejó de centrarse en sus diferencias para fijarse en lo que les une. Por ejemplo: el sentido trascendental de la vida en un mundo cada vez más secularizado. De hecho, León XIV destacó que el papel de las religiones en la actualidad es este.