El papa dijo que admiraba a Caravaggio pero también la Crucifixión Blanca de Marc Chagall. Esta última pintura será la que puedan contemplar los peregrinos que visiten Roma a partir del 27 de noviembre. Y todo por cortesía del Instituto de Arte de Chicago, en Estados Unidos, que ha cedido la obra por dos meses para que se exponga de manera gratuita hasta el 27 de enero de 2025.