El último adiós entre jóvenes y León XIV tuvo lugar tras la misa. El pontífice subió al estrado para dirigirles estas palabras. "Bien, chicos y chicas. Un último adiós. Gracias de nuevo a todos vosotros. Gracias por la música, gracias a todos los que han trabajado para preparar muchas cosas durante esta semana, durante este jubileo." Desde ahí recordó que aún hay una cita pendiente: Corea.