Los consistorios no solo son para la creación de cardenales o fijar fechas de canonizaciones. Este es el conocido como ordinario. Pero hay otro en el que, según el código de derecho canónico, se tratan los siguientes asuntos: "En el consistorio extraordinario, que se celebra cuando las necesidades particulares de la Iglesia o el tratamiento de cuestiones particularmente graves así lo requieren, se convocan a todos los cardenales." A día de hoy, serían poco más de 250 purpurados los que deberían viajar a Roma si León XIV decide convocar este tipo de asamblea. Y parece que lo hará.