Las décadas posteriores a la Reforma Protestante fueron convulsas en la Iglesia católica. Los expertos señalan que entre otras cosas, provocó una reacción pastoral fuerte que desató un contundente impulso evangelizador. En Roma destacó una figura discreta pero práctica y de carácter muy decidido. Se trataba de un sacerdote español, Juan Bautista Vives y fue uno de los principales impulsores de lo que hoy es el Dicasterio para la Evangelización; que actualmente es dirigido por el cardenal filipino Luis Antonio Tagle.