En la catequesis de este miércoles, el Papa conmemoró los 50 años de la importante declaración "Nostra Aetate”. Con este documento, el Concilio Vaticano II elogió a las demás religiones y abrió el camino para el diálogo interreligioso, algo hasta entonces impensable. Por eso, asistieron musulmanes, judíos y representantes de otras religiones.