Papa Francisco en el Regina Coeli del Domingo 21 de mayo:
Es triste pero, un mes después del estallido de la violencia en Sudán, la situación sigue siendo grave. En mi apoyo a los acuerdos parciales conseguidos hasta ahora, renuevo una llamada de corazón para que se abandonen las armas. Y pido a la comunidad internacional que no ahorre ningún esfuerzo para que prevalezca el diálogo y aliviar el sufrimiento de la población.