Casi año y medio después, el cardenal Zuppi vuelve por segunda vez a Rusia. Lo hace de nuevo en calidad de enviado especial del papa para la misión de paz en Ucrania.
Desde la Santa Sede señalaron que este viaje busca sumar esfuerzos para favorecer la reunificación familiar de los niños ucranianos, cuya cifra asciende a unas 20.000 deportaciones, según Ucrania, y también el intercambio de prisioneros.