El recién elegido alcalde de la ciudad palestina de Belén pudo saludar a León XIV tras la audiencia general. El mandatario, que es cristiano, le trasladó al pontífice una de sus principales preocupaciones, tal y como explicó a medios vaticanos: "Hoy solo quedan 168.000 cristianos en Tierra Santa, mientras que hay más de 4 millones de palestinos cristianos en el mundo. Eso, por sí solo, muestra la presión que soportan los cristianos."