El Papa Francisco ha dedicado muchos momentos de sus apariciones públicas a pedir la paz en la Franja de Gaza y el retorno a casa de las personas que Hamás secuestró el 7 de octubre.
También telefonea con frecuencia a la única parroquia católica que hay en Gaza la parroquia de la Sagrada Familia (en árabe: كنيسة العائلة المقدسة) y que acoge a muchos refugiados, el Papa los anima y reza por ellos.