Francisco: "Pecadores sí, todos, pero corruptos no. Hay que reconocer los pecados y dejarse ayudar". - Durante la Misa en la Casa Santa Marta el papa Francisco puso como ejemplo a San Pedro que era un pecador y tenía defectos, pero que fue noble y se dejó ayudar por Cristo. En sus encuentros Jesús le ayudó a madurar. El Papa explicó que Pedro "era un pecador, pero no un corrupto" porque "reconociendo las propias miserias Dios ayuda a seguir adelante".